La banda de La Plata se presentará en nuestra ciudad antes de su gira por Bolivia.
La banda platense La Rastrojera se presentará en la ciudad de Salta este jueves 16 de febrero, desde las 23, en Códice Club (Balcarce 873). Los salteños Black Piston serán el grupo invitado para una noche de puro rock rutero vieja escuela. Las entradas costarán $500 y se venderán en puerta el día del show.
El grupo nació en 2006 como tributo a Riff. “La banda se llama La Rastrojera por un Rastrojero 68 que yo tenía. Salíamos de gira con la camionetita”, le dice a Rock Salta el Negro, cantante y fundador del cuarteto, en la previa del viaje.
Desde su formación, la banda participó de distintos motoencuentros y festivales como Cosquín Rock. Además, compartió escenario con artistas reconocidos como Vox Dei, Tano Marciello y Mad. Si bien al comienzo versionaban canciones del legendario combo de Pappo, pronto comenzaron un camino propio que se consolidó con Rock de las Cavernas (2008), su disco debut. El segundo, Sobrecarga de rock, se publicó en 2016. Tras un parate de dos años, La Rastrojera volvió en 2021 y actualmente trabaja en su tercer álbum. En las próximas semanas realizará una gira de al menos cinco fechas en Bolivia. Antes se presentará en nuestra ciudad.
“Estamos muy contentos de tocar allá en Salta. Al otro día salimos para Tarija y arrancamos la gira por Bolivia. Estamos muy emocionados. Es una experiencia nueva para nosotros salir tan lejos de la provincia de Buenos Aires. Hemos tocado en Córdoba y Santa Fe, pero el norte es la primera vez”, cuenta el Negro. “En lo personal, conocer Salta es un sueño que tenía que cumplir, y la banda me lo está dando, así que estoy doblemente emocionado”, sigue el músico, que reconoce que “arrancar este año así es increíble”.
Con 16 años encima, La Rastrojera mantiene firmes las convicciones de un género que atravesó las décadas y soportó modas y malos augurios de aquellos que aseguraban que el rock tenía las horas contadas. “¿Qué significa para mí hacer rock? Que voy por el camino indicado (risas). Y no tiene que morir el rock and roll. Jamás. Me crié con música en casa. Mi abuelo era cantante de tango, mi viejo escuchaba folclore, mi vieja escuchaba rock. Yo opté por el rock and roll”, cuenta el Negro.
“Creo que hacer rock and roll significa ponerte a estudiar un instrumento, a componer tus propias músicas. Significa un estilo de vida. Por ahí, en otros géneros, apretás el auto-tune y canta cualquiera, no se sientan a agarrar una guitarra, no saben tocar un instrumento, nada. Creo que el rock and roll no va a morir nunca y acá hay varias bandas de chicos de quince, 16 años, que hacen rock and roll y yo las sigo, las voy a ver. Espero que sigan creciendo”, finaliza.