Lo siguiente es una reflexión del día pensando íntimamente en la hermosa relación que unió a Spinetta/García. Una manera distinta de recordar al Flaco.
“Si fuera un árbol sería un Spinetta” cantaba Charly García desde “Dileando con un alma (que no puedo entender)” tema que abre aquél disco fumón titulado Rock ‘n’ Roll Yo. Y la letra seguía rezando: “Hay ángel/ángel que me guardas bien/ /Estoy dileando con un alma /Que no puedo entender”. El dúo explosivo Charly/Luis Alberto siempre fue bienvenido y valorado por todos los allegados a la historia del rock argentino, tanto desde la vereda de los músicos como de los periodistas/fanáticos. La Rolling Stone los juntó en una tapa en el 2009, donde nace la polémica que enfureció al Flaco por taparle la frase “Todos Fuimos Todos Somos Todos Podemos Ser” estampada en una remera negra.
El mismo año también fue clave para los dos: Un Charly devuelto a la vida (con Palito Ortega a la cabeza) dispuesto a celebrar su cumpleaños en lo que fue “el primer concierto subacuático del mundo”… show que quedó registrado en DVD y que muestra a un García mucho más activo que las épocas oscuras del frustrado proyecto Kill Gill. También aparece – nuevamente- su eterno amigo, para cantar a dueto “Rezo Por Vos”, canción que quedó estancada dentro del proyecto en el que ambos artistas iban a grabar canciones compuestas tanto individualmente como en conjunto. El Flaco por su lado despidió el 2009 con un martillazo al hígado de los seguidores de toda su obra: junto a las bandas eternas en un show en Vélez que puso un sello final de 5 horas y media. Otro concierto registrado en DVD donde también aparece su amigo García para cantar otra vez el mismo tema.
Abrazados al dolor estos dos tipos siempre miraron hacia delante dejando excelentes joyitas dignas de ser escuchadas cuando a uno se le antoje y/o debatirlas. Ahora es Charly el que lo mira desde abajo, casi como buscando a ese ángel de la guarda que describió tan bien en “Dileando…”: “Hay alguien, alguien que me quiere ver/ Estoy dileando con un alma/ Que no puedo entender”. Y ahora la relación que mantuvieron tanto tiempo García/Spinetta se ve aún más fortificada; uno de ellos no está entre nosotros pero lo imagino a Charly riendo abrazado al Flaco desde algún lugar, alguna eternidad, aquella que se formaba cada vez que estos dos tipos se daban la mano.
Una tarde gris de lluvia nos dio la mala noticia. Muchos empezaron a “rezar por vos” nuevamente pero esta vez por el luto de la familia Spinetta. No tan lejos quedó la pelotudez del periodismo berreta farandulero que llevó a Luis a la portada de Caras saliendo de una sesión de tratamiento de su enfermedad, ya demacrado. Las cartas y/o opiniones en contra empezaron a volar y ahora no nos sorprenda que algunos hagan eco jugando con el doble sentido de un tema tan jodido como lo es esta enfermedad. Se me vienen a la cabeza las imágenes “filtradas” que mostraban a un Charly acabado, ido, perdido tendido en una camilla saliendo del hospital donde hizo la rocanrol yo que lo postró en un largo tratamiento de rehabilitación. Memorias que lamentablemente se cruzan con periodismo de última escala que succiona en las bolas de los que no tienen nada que ver.
Ahora el Flaco es el niño dormido y seguramente Charly – y muchísimos artistas más- le van a cantar plegarias eternas que despiden muchos años de una vida musical que forjó escuela donde quiera que se piense. Recuerdo la primera vez que escuché Gardenia y sus hilos alrededor de la imagen spinettiana quedaron dibujados en mis oídos. Ellos sabe llevar tan bien esta influencia que a veces uno mismo dibuja canciones del Flaco con el dedo dando volteretas por el aire: “Y quizás nos encontremos entre sueños/donde guardarás secretos. /Y es que aquí las flores nunca mueren. /Y es que este mundo es especial, /juguemos a ser viento y viajar.” Dejemos jugar a nuestras mentes para llegar a ese destino eterno donde Charly abraza a Luis y hacen de las suyas… Así muchos casos más se dieron y se van a dar. Y a partir de este momento el niño dormido empieza a reír, quizás se sienta gorrión esta vez.