Carajo rugió nuevamente en el NOA. Repitiendo la gira del 2014, trajeron sus arrolladoras canciones. Repasamos el caluroso show en Salta.
Fotos gentileza de Pablo Welschen / Carajo Facebook
“Pura vida para todos”, grita Marcelo «Corvata» Corvalán anunciando la cuarta canción del show. El público aprueba con un grito enfervorizado y el ritual del pogo, puños y celulares en alto arranca de nuevo. Es la medianoche del sábado y la fecha salteña recién empieza pero ya es una olla a presión. Algo más de trescientas almas sienten el sofocante calor, el vapor se condensa en el techo y cae en forma de lluvia. Las paredes de vidrio chorrean y afuera hace mucho frio. Un contraste de temperatura total que seguramente se cobrará alguna victima que irá derecho a la farmacia en la semana.
En poco más de una hora y media, Carajo repasa toda su discografía pero hace hincapié en su último material Frente a Frente (2013), un disco doble de dieciséis canciones separadas por su agresividad que tiene el sonido carajense característico, pero además permite ver algunas nuevas facetas. Con quince años de historia, el renovarse es marca registrada del grupo. Como le explicaba Tery, su guitarrrista, a la revista Rock Salta: “Cuando no nos seguía nadie quisimos hacer algo nuevo. Y al otro disco, cuando teníamos pocos fans o poca gente que nos venía a ver, igual queríamos hacer algo distinto. Si te fijás, en cada disco pasa lo mismo. Obviamente que la presión nos la ponemos antes que nada nosotros mismos, con tratar de dar lo mejor, de hacer un mejor disco, tratar de agregar algo en cada canción. Es como una naturaleza nuestra, no nos permitiríamos hacer algo que no aporte nada nuevo o que sea lo mismo que antes, todo nace de esa premisa.”
Las luces parpadean constantemente, dejando el reducido escenario en un blanco o negro total. Fabrica de Música es el recinto más chico en el que tocaron en Salta. Los anteriores espectáculos fueron en grandes boliches alquilados para la ocasión, incluida una fecha compartida con los desaparecidos Árbol el 1 de abril de 2005, el mismo día de la llamada Noche de las Tizas, cuando el ex gobernador Juan Carlos Romero ordenó el desalojo de la Plaza 9 de julio a los docentes que reclamaban por un aumento de sueldo. Ese día, la fecha fue dedicada a la lucha docente y el show finalizo con las dos bandas interpretando “Jijiji”.
En los últimos años, Carajo se trasformó en una de las bandas más importantes del país. En el Cosquín Rock 2015, la super banda internacional De La Tierra no le hizo ni sombra a este power trio cuya única comparación posible por lo demoledor de su sonido cae en Divididos. Pero si nos ponemos exigentes las verdaderas piñas sonoras que generan estos metaleros son más contundentes que el cuelgue setentero que proponen Mollo y los suyos desde hace tiempo.
En una de las pausas, Andrés «Andy» Vilanova tuvo su saludo especial por el día nacional del batero, mientras que Hernán «Tery» Langer fue el foco de cada celular, en especial en la última parte del show donde brillaron «Luna herida», «Ácido» y el hitazo que lamentablemente sigue respirando actualidad, «Sacate la mierda».
Hubo revancha y, a diferencia del año pasado donde los tiempos apuraron, esta vez el trio pudo cerrar con su conocido y sumamente pedido “Medley de Pantera”.
Como es costumbre, la gira tuvo fechas consecutivas por Córdoba, Santiago del Estero, Tucumán, Salta y Jujuy. La lista de temas no varió demasiado, salvo algunas pocas excepciones. Seguramente la próxima visita ya será con disco nuevo.