Entrevistas

Un día iban a volver los setenta

Sambara, una de las bandas revelación del último Personal Fest, acaba de lanzar Asomándose, su álbum debut. Entrevista con el cantante Federico Schujman.

Sambara es nuestra vida, nuestro proyecto, el espacio en el cual depositamos nuestra creatividad y sensaciones”, define Federico Schujman, cantante de la banda que entre trazos vintage anclados en los setenta constituye una de las revelaciones musicales de 2013. Desde las primeras juntadas del grupo (que completan Marcos Lorenzo Inchausti, Andrés Elijovich, Gabriel Kerman, Ariel Schujman y Julián Malosetti), a principios del 2011, los seis integrantes sintieron la necesidad de encontrar y construir un proyecto donde poder realizarse artísticamente. En octubre fueron una de las revelaciones del último Personal Fest Deluxe, en Buenos Aires, y a fines de noviembre lanzaron Asomándose, su primer disco. En esta charla, Federico habla sobre los orígenes del grupo, sus ambiciones y los próximos proyectos de Sambara.

 

– ¿Cuál es el significado de la palabra Sambara?
– Surgió desde adentro de la música. Fue una creación nuestra dentro de un juego de armonización de voces que hacíamos antes de cada ensayo. Varios días después de decidir el nombre de la banda nos enteramos que Sambara es un personaje de la mitología hindú, un tanto diabólico por cierto, y hasta el día de hoy seguimos aprendiendo cosas sobre su historia.
– ¿Cómo por ejemplo?
– Nos llegaron muchas historias. Y lo que podemos saber es que es un personaje muy ligado a la sexualidad. En sus dibujos está muy presente el sexo y sospechosamente aparece como un monstruo con doce brazos (nosotros somos seis) haciéndole el amor a una mujer.
– Volviendo a lo musical, ¿cuáles son las influencias que tiene la banda, y cuál de ellas creen que se plasman en el sonido de Asomándose?
– Las influencias que existen en Sambara son diversas. Esto tiene que ver con la forma en la que encaramos la composición de los temas. En la sala de ensayo los seis creamos, opinamos y aportamos cada uno lo suyo. De esta manera se fusionan en las canciones las influencias de los seis y éstas varían desde el rock clásico nacional (Spinetta y Charly, fundamentalmente) hasta sonidos más modernos del rock internacional.
En Asomándose aparece un poco de todo esto, pero marcado y encaminado por el oído de Javier Malosetti, productor del disco y otra de las influencias grandes que tiene la banda.
– Claro, el sonido de La Máquina de Hacer Pájaros, parte de Seru Giran o Spinetta Jade se respira muy fuerte en ustedes. ¿Hay un sentido consciente de tributo a ese legado, que muchos reivindican desde la palabra y no tanto desde la música, o simplemente fue saliendo así?
– La realidad es que todos los integrantes de Sambara respiramos a Spinetta, a Charly y admiramos mucho sus obras. Desde ya que los reivindicamos y los consideramos influencias importantes. Pero tampoco es que la música que hacemos es un tributo consciente a ellos. Simplemente a la hora de componer somos sinceros con nuestros gustos y nuestras ideas. Por eso aparecen estos sonidos y tantos otros que también nos influencian.
– ¿Cómo ven la propuesta de Sambara en relación a los sonidos que hoy dominan el panorama del rock argentino?
– Nuestra propuesta es siempre animarse a arriesgar. Creo que esto se siente en el sonido, en el show en vivo y con lo que transmite la banda en general. Nuestra búsqueda es dejar ser a las cosas que nos surgen. No limitar la composición o las búsquedas sonoras por «amoldarse» a lo que el panorama actual y el mercado imponen. Así es que dejamos fluir a las distintas influencias musicales que tenemos y combinamos, como te decía antes, un sonido que remite a sensaciones «setentistas» con influencias modernas.
En nuestro corto pero intenso recorrido conocimos muchas bandas que se animan a arriesgar y salirse del molde, pero en la mayoría de los casos el mercado impone a las bandas que se ofrecen desde lugares comunes. Nosotros buscamos romper con eso, ofrecer algo distinto y hacer llegar nuestro mensaje a la mayor cantidad de receptores posibles.
– ¿Con qué banda de la escena argentina se sienten hermanados en esa actitud de búsqueda y riesgo musical?
– La verdad es que nos cruzamos en este tiempo con muchas bandas con las cuales nos sentimos hermanados. Voy a ser injusto porque es imposible nombrarlas a todas. Pero en este momento se me vienen a la cabeza Atahualpa Newpunky, Pájaro Inaudible, Nidos, Jean Jaurez, Caperucita Coya, Camerú, La Conjura de los Necios. Y hay muchas más. Es sólo cuestión de ir a escuchar bandas, buscar y finalmente encontrar.
– Yendo a Asomándose, no es muy común que un disco debut salga por una discográfica (Sony) como la que los edita a ustedes., ¿Sienten el peso, tanto positivo como negativo, que eso puede tener?
– Más allá de que sabemos que no es muy frecuente, en nuestro caso la edición del disco por Sony Music nos favoreció mucho. Fundamentalmente porque el arreglo por la edición lo hicimos una vez que el disco ya estaba terminado en su totalidad. Nos sentamos con el sello una vez finalizada la grabación, la mezcla, el master y hasta el arte de tapa. En este proceso contamos con la ayuda de muchos amigos y músicos y con la producción artística de Javier Malosetti. Pero al no interferir el sello en lo que refiere al contenido del disco, entonces el ofrecimiento de editarlo y distribuirlo significa para nosotros un salto y la posibilidad de que nuestra música y nuestro mensaje lleguen a más gente.
Por otra parte, más allá de ser nuestro primer disco y que Sambara tenga algunos pocos años de existencia el recorrido que hicimos fue muy grande e intenso, tocando y dándonos a conocer por todas partes. Por eso la grabación del primer disco nos encontró preparados para apuntar alto.
– ¿Cuáles son los proyectos y anhelos para el 2014?
– El anhelo es llevar Asomándose a todas partes. Cerramos el año con shows muy importantes en Capital y la idea es empezar a llevar el disco al interior. Girar y tocar mucho en vivo. Sentimos que nuestro lugar es el escenario y queremos tocar en cada lugar en el que se nos presente la posibilidad. Ese fue el camino de Sambara desde el arranque y esperamos poder seguir por esta senda en el 2014.