LaForma celebró sus primeros diez años con un recital en Mallku. Entre invitados, amigos y canciones viejas y nuevas; el grupo volvió a los escenarios tras nueve meses de encierro compositivo.
Diez años de banda no vienen solos: gente que se subió, gente que se bajó. Buenas o malas noticias. Cambios, restructuración total y así. LaForma celebró su década de vida el sábado 8 de septiembre en un Mallku Bar caluroso por dentro y con lluvia por fuera. La gente esta vez apoyó a medias, pero el sentimiento por la amistad y ganas de ver a esta banda en vivo se sintieron.
Una extensa lista de temas estaba al pie de uno de los micrófonos del retocado escenario del bar. En ella figuraba la historia misma de la banda, trazos que remontan a las épocas del primer disco (o al segundo) y otras que marcan el presente vivo de los artistas. Muchas de Munición de Rock & Roll (2009), otras de Vamos (2010) y algunas aún inéditas que vienen a delinear el presente camino a seguir por este cuarteto salteño conformado por Horacio Ligoule (voz, guitarra), Rodrigo Martín Troyano (batería), Gonzalo Delgado (bajo, coros) y Cristian Gana (guitarra, coros).
Recordando una de las tantas experiencias vividas por el grupo durante el 2011, la noche arrancó con el documental de la tocada en el Penal de Villa Las Rosas, registrado por la gente de Salamanca TV. El primer invitado de la noche fue el guitarrista Hernán Bass, que colaboró en dos temas de Vamos. Ya desde un principio, la invitación a viejos amigos de la banda se hizo visible (no suelen arrancar los shows con gente invitada sobre escenario) y así desfilaron dos ex miembros del grupo: el Cholo Sanchez en armónica y el Gallego González en el acordeón; ambos de las primeras épocas fórmicas, cuando tenían un aire mucho más blusero.
“Iraky People”, “5:45 Blues”, “Yugular”, “Revolution Chango” y “Ácido fórmico”, todas del primer disco, sonaron tal como fueron registradas para el CD (con el aporte de los invitados también). Además, dijeron presente las canciones más nuevas, como “A Costa del rock” (con dedicatoria a Federico “Pibe” Acosta, en el quinto aniversario de su fallecimiento), “El despojao”, “Inmoral”, “Palo & gas” (dedicada a la represión ocurrida en El Tabacal hace unas semanas) y “Sueños exiliados”. La invasión andina de invitados especiales estuvo presente como siempre, dando mucha más fuerza al trabajo que la banda logró experimentar en todo Vamos, esa mixtura entre el rocanrol del primer disco y los sonidos latinoamericanos de la última etapa. Lo nuevo de LaForma fue presentado en dos canciones que van a ir a parar a un disco homenaje al Cuchi Leguizamón por parte de bandas del rock salteño y un tema destinado al nuevo sonido de la banda. “Esperemos que lo hagamos bien”, fue la consigna antes de tocar los temas. Los más allegados al grupo ya se las sabían todas y el resto sólo se dedicó a prestar atención.
Hacia el final, toda la energía del cuarteto sumado a los solos de guitarra de Gana en “Ácido fórmico” terminaron por ponerle el broche especial a una noche llena de amigos, de gente que alguna vez estuvo de paso, de los que hacen el apoyo siempre y de buena música. “Elegir no traicionarse” era el título para la velada. Eligieron bien.
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