Pogo y porro en el Provincial para el debut del dúo en la ciudad. Más de mil jóvenes y no tanto se subieron al tren de deliro dinamita que este par de degenerados lleva adelante.
Fotos: Max Hanne
Con un ascenso meteórico desde su arranque a fines del 2018, el lugar común de la comparación con IKV, y muchos mimos de la comunidad rockera vernácula (Fito, Dante Spinetta, Miranda!, Marilina Bertoldi, entre tantos otros) Ca7riel y Paco Amoroso llevan adelante una carrera de expansión constante. De ser los raros y de culto a ser tan freaks y populares.
Luego de su acrobático paso por el Movistar Arena, el dúo sigue presentando Baño María (2024), su primer disco, por distintos escenarios del país. En medio de esta gira finalmente se dio la esperada visita a nuestra ciudad.
Pasadas las 21.40 Ca7triel y Paco se sumaron al cuarteto musical que los acompaña, donde se destacaron DJ Anita B Queen en las pistas, coros y guitarra y Eduardo Giardina en la batería.
Arrancaron con algunas de Baño María: “La que puede, puede”, “Baby Gangsta” y “Dumbai”. Lo hicieron con agite, corriendo por todo el escenario y hasta metiendo coreos. La gente dejó las butacas inmediatamente y saltó todo lo que pudo, celular en mano, claro. Mención especial para esos porros que estuvieron presentes toda la noche, pero que nunca fueron encontrados por más que los guardias y la gente del teatro investigara en cada sector.
A pesar de las críticas que generó que un show de tanta energía se hiciera con butacas de por medio, lo cierto es que la mayoría de los presentes era menor de edad, algunos incluso estaban con sus padres, y si se hacía en algún boliche no iban a poder estar presentes. Eso sí, los saltos se sintieron más que en ningún otro recital en el Provincial, tal vez solo comparado a lo de Trueno el año pasado.
El recital fue una topadora durante una hora de duración, casi sin pausas, dividido en cuatro partes mediante instrumentales o pistas. En una de ellas hasta se cantó la canción de Toy Story. Sonaron algunas de las más destacadas de los discos solistas que dieron en el 2021, como “Viuda negra” o “Bad Bitch”, de los pocos momentos donde Ca7riel tomó la guitarra. Una lástima, ya que es de los mejores de su generación en las seis cuerdas. Con “Pirlo” llegó el momento de bajar un cambio y la balada se vivió con lo celulares en alto, mientras el par se abrazaba sentado en el escenario.
La mejor parte del show fue la seguidilla oscura y pesada de “McFly”, “Coca-Cola” y principalmente “Jala Jala” y “Ola mina XD”. Todas en versiones más acortadas, densas y violentas. Con luces rojas pintando el teatro, flashes blancos, una batería arrolladora, y el dúo en estado trap punk. Contrastando con la primera parte reggaetonera.
Mediante Baño María abrazaron un veta pop urbana cercana al Bad Bunny más inofensivo, que siguieron de ejemplo muchos artistas virales de Spotify. Sólo resta ver a Lali y Tini como invitadas. Atrás quedó esa música futurista y ciberpunk donde en la era del trap destacaban entre el resto por lo fresco, produciendo shows experimentales con la ATR Vanda, abrazando el shitposting. Los tiempos pasan rápido. Ahora lo freak y popular es meter un jacuzzi en el Lollapalooza mientras se escucha un disco, o invitar a la mediática Wanda Nara a cantar con ellos y que levante la noticia cada espacio de chimento del país. Los tiempos pasan muy rápido. Además Ca7riel y Paco tienen visto bueno para hacer lo que quieran, ni siquiera los ataques de libertarios por llamar a no votar a Milei en su redes el año pasado les bajó la popularidad.
Para el cierre quedaron “El único”, con su letra viral de socios, “OUKE”, con las flores pero sin Lamothe, y “Cono hielo”, hit fernetero imbatible. De esa manera mezclaron tal vez lo mejor de las tres temporadas que llevan juntos. Como final hubo baile entre los músicos y un electro saturado que dejó a la gente pidiendo más y sin moverse de sus butacas, hasta que finalmente se cerró el telón. Acá si servía que el show fuese en un boliche porque la gente quedó con toda la manija y hasta algunos se fueron buscando el after. Quedará para la próxima.
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