Coberturas

Gente en Pueblitos

Pasó la primera edición del Cachi Rock 2013, prometiendo repetir antes de fin de año. Cinco bandas le pusieron una dosis de energía a los Valles Calchaquíes y nosotros estuvimos ahí para contártelo. 

La idea de un verano festivalero en Salta no es ajena debido a eventos que año a año tratan de imponerse a la hora de organizar un show con varias bandas. El folclore tiene lo suyo bien instalado. Tanto, que el verano le queda chico. Dentro del mundillo del rock el panorama es distinto pero, haciendo memoria, podemos recordar grandes tocadas dentro de festivales que, lamentablemente, hoy ya no existen. De todas maneras, arrancar el 2013 con un poco de esto resulta alentador para varios. Durante la noche del jueves 17 de enero se desarrolló en la localidad de Cachi el primer festival de rock del pueblo, una corrección necesaria al afiche que rezaba ser el primero de los Valles Calchaquíes cuando de hecho existen en el haber festivales en San Carlos, Cafayate y otros lugares más.

El Cachi Rock se promocionó al principio con dos bandas solamente y con el tiempo la cosa fue tomando mayor dimensión, ya que se empezaron a sumar otros grupos. En total tocaron cinco: La Yugular, de Jujuy; Josefita, de Buenos Aires; y los tres restantes desde Salta: Perro Ciego, Adobe y Madre T- Rezo. Pero, ¿cómo surgió esto? “Con mi programa de radio empecé contando la historia de los grupos, primero internacionales y después nacionales. De a poco me fue surgiendo la necesidad de escuchar a los artistas hablar: en una ciudad como una capital uno tiene la posibilidad de escucharlos en vivo sea por la cercanía, Internet, televisión o cualquier medio de difusión. Acá en los Valles no tenemos esa posibilidad, así que me dije ‘tengo que buscar la forma de hacerlo desde acá’. Y así empecé a buscar bandas de cualquier provincia, bandas emergentes más que nada. Por ejemplo, Goy Karamelo tocaba en Jujuy, entonces yo iba y me intrigaba no Goy, sino a la banda soporte. O sea, le empecé a dar bola a los artistas elegidos para tocar como ‘soporte de…’. Así conocí muchas bandas que las sigo en Facebook, veo dónde tocan, las giras, y las comento en mi programa”, dice Matías Canale, creador del festival. Matías es oriundo de Buenos Aires pero hace un tiempo que se asentó en Cachi: ”Josefita fue una de las tantas bandas que conocí así: bajaba música sin saber quiénes eran. La Yugular fue una recomendación expresa de Goy; a Perro Ciego llegué porque cuando vine de Buenos Aires los que sonaban como ‘banda conocida del ambiente’ eran ellos, la gente de Mallku me recomendó Madre T-Rezo, y me topé con los Adobe por Facebook, escuché tres temas y listo, quedaron dentro del festival”, cuenta sobre el armado de la grilla definitiva de la fecha. Como la idea inicial era armar algo relativamente chico (contar con Perro y La Yugular como únicos protagonistas no es algo menor) para el mentor del Cachi Rock quedan muchas otras bandas más por escuchar y hacer conocer. Pero vamos despacio.

perro ciego

La fecha se desarrolló en un boliche tropical llamado La Diosa, queda a unos 3 kilómetros de la plaza principal de Cachi, cerca del puente acceso principal al pueblo. La intensa lluvia veraniega fue una dificultad más para algunos, pero la gran mayoría que se comprometió en ir comprando la entrada se hizo presente. El camino desde la plaza central hasta La Diosa fue lento y esquivando charcos para evitar el barro de las calles todavía no pavimentadas. Pasadas las 22 arrancó el show de Adobe, repasando temas del disco Corazón de Tierra (2012). Sonaron sólidos y brindaron un buen inicio del festival. Cabe resaltar el impecable sonido que tuvieron todas las bandas, no hubo problemas para entender las voces de los cantantes ni solos de guitarra o los arreglos de batería: todos sonaron por igual y el sonido estuvo sobresaliente. “Escarcha”, “Carnaval” y “Los locos” fueron algunas canciones que sonaron del repertorio de Adobe. Josefita es una banda oriunda de Lugano, Buenos Aires y en realidad son cinco integrantes pero por cuestiones diversas se presentaron en formato acústico sólo con voz y guitarra criolla, tal como un fogón entre amigotes. El estilo recuerda mucho por momentos al Zambayonny más poético al relatar historias y reflexiones de la vida cotidiana y también al cancionero de Las Pastillas del Abuelo (hecho no menor, telonean a la banda del Pity Fernández en los shows en Capital Federal). Madre T-Rezo fue la siguiente banda en subir a tocar al escenario: pequeño y delimitado con una baranda sirvió de recuerdo para el nostálgico del Hinchapelotas Pub. “El kia”, “La semilla”, “Sindrome de Dan” y el cover (o reversión al español) de “Killing In The Name” de Rage Against The Machine sonaron dentro de una extensa lista de temas.

Luego fue el turno de los jujeños de La Yugular con la mejor performance del festival: sonaron muy bien y le pusieron el toque reggae dub que hacía falta luego del rocanrol que venía sonando. Sonaron las conocidas reversiones de “El genio del dub” de LFC y “Mi sueño mejor”, de Los Kjarkas. También “Puedo sentir”, “Siempre dicen” y “Mensaje”; entre otras canciones del disco Plantate! (2011). La gente se enganchó con todo el show y pidieron bis. El final estuvo reservado para Perro Ciego y fieles seguidores que llevaron la bandera más grande de la familia de Perro y también las muchas otras que siempre adornan cada tocada de la banda: un show un tanto particular porque, suplantando a un Jopo Zenteno de vacaciones, la batería estuvo a cargo de DiegoGacelaGiménez, un viejo amigo. Por tal motivo algunas canciones sonaron un poco más a bajo ritmo que el habitual de los shows en vivo de Perro. Así sonaron “Amanecido”, “Macabro”. “Vamos a bailar”, “Estabas ahí”, “Boogie del Café” (con el Pelado Vega tocando el bajo como un contrabajo jazzero) y “Pelafustán (No tengo groove)”, con el Mula, de La Yugular como invitado en la voz. Hubo un único inconveniente con dos personas del público que parece que no terminaron de entender el concepto del pogo y la policía tuvo que intervenir para sacarlos del local.

Tres y media de la madrugada del viernes 18 en Cachi y el festival había llegado a su fin. Afuera del boliche la lluvia nocturna seguía sonriéndoles a los caminantes callejeros y empezó la caravana hacia el pueblo en busca de un refugio o el regreso a casa. En un fin de semana de fiestas culturales (ese viernes y sábado se realizó un festival folclórico, coronando el domingo con un bailongo de cumbia) el rock tuvo se espacio. El panorama hacia el mañana indica la realización de una segunda edición del Cachi Rock. Canale, el mentor del festival, miraba a la gente salir del boliche y sonreía al ver culminado su primer aporte a esa localidad, el rock en pueblitos. Música en las sombras (que se transmite miércoles y viernes de 20 a 22 por FM San José de Cachi, en el 101.3 Mhz) es el programa de radio que hace y cuando se le pregunta por el significado del nombre, reflexiona un poco y dice: “Acá a veces hablás de Pappo y los Rolling Stones y no saben ni quiénes son o qué hacen. Y está buenísimo porque, por ejemplo, ahora hablo de Adobe y son tan famosos como los Stones porque justamente es eso, música en la sombra.” Apuntar a salir de eso, haciendo conocer e informando, suma puntos.