Coberturas

Fabi Cantilo en Salta

fabiana cantilo

Fabiana Cantilo cantó en Salta, presentando su nuevo disco, Inconsciente Colectivo. RS estuvo presente y te cuenta las sensaciones que dejaron esa noche.

pablo choke torramorell
Por Pablo Choke Torramorell – pablo@rocksalta.com

Cancionera Popular

fabiana cantilo

Noche de miércoles en los fines de abril. En el Teatro Provincial todo parecía marchar bien. Fabiana Cantilo estaba en Salta y preparaba un show para todos los salteños que, contentos con entrada en mano, hacían un tumulto en la entrada del ex Cine Victoria.

Mi gran curiosidad nacía del repertorio de temas. Para mí, la Cantilo es la Tía del Rock Nacional, esa que te toca “una que sabemos todos” con la guitarra cuando vos tenés ganas de romperte los oídos con las típicas nacionales: Y es así que no me sorprendí al escuchar un “Costumbres Argentinas”, un “Wadu-Wadu”, un “Inconsciente Colectivo”, un “Cartas sin Marcar” o un “Pupilas Lejanas”. Y hablando de lejanas debo admitir que el lugar que me tocó ocupar para ver el show fue algo lejano….quizás eso ayudó a que la noche con la Tía se me haga más rápida.

No sé ustedes pero cuando el telón se abrió a las 21:55 mis ojos se desviaron automáticamente hacia las piernas y la pollera corta, blanca y brillante de nuestra Tía…qué malo lo mío pensarán algunos de ustedes, pero les aseguro que todos los silbidos acompañados de un “dioossa” (así, alargando la s) que se escuchaban desde las plateas demuestran que no era el único que se fijó en eso: “Vimos que tenés lindas piernas Fabi, ¿cómo hacés?” le preguntó uno de Canal 4 al terminar el show y nuestra Tía le dijo “hago mucho yoga, gimnasio y salgo a correr…tuve que adelgazar este verano”. A esa altura no sabía si me encontraba en un after show o en medio de una conversación de peluquería.

Creo que Fabiana es una de las pocas artistas del rock nacional (en general) que tiene marcadísimos sinónimos. Pienso en ella y pienso en Virus, Los Abuelos, Soda, León, Charly, Fito, Spinetta….Divididos, Pericos y así nombraría toda la primera y segunda escuela que nuestro rock tiene. Y quizás que esto sea bueno para algunos, pero también es malo para otros, en donde me incluyo. “Conocí a la Cantilo por el temita este de Calamaro que dice ‘Esperando, esperándote, Costumbres arg…’ ah no, ¿ése es de los Abuelos no?” te suelen decir los que escucharon a nuestra Tía por las radios, los canales de televisión, etc. Y es que ése es el fenómeno que Fabiana generó en nuestro rock nacional y en nuestras mentes: así como Soda Stereo o Virus tuvieron/tienen su “sodamanía” y “virusmanía” respectivamente o Charly, que tiene a sus “fieles”; la Cantilo tiene su “era de la confusión” ya que es la encargada de borrar de nuestras mentes a los verdaderos creadores de una canción; y es así que tenemos a chicos que piensan que “Tema del Pototo” es de la Cantilo, o sino que “Wadu-Wadu” es de León Gieco en la época que se daba con todo desde Usuhaia a la Quica. Creo que la mayoría de ustedes (hago excepciones con los que tienen más años y experiencia en esto) escucharon por primera vez “Tu Enfermedad” bajo la versión de nuestra Tía querida, o sino, podrán reconocer que es más conocida la versión Fabiana que la versión Andrés.

fabiana cantilo

Igual hay que reconocerle algunas cosas a nuestra Tía. También hubo momentos de la noche que se adornaron con temas propios que demuestran que algo aprendió de los demás. Después del bis se largó a cantar dos temas con sólo un piano de fondo y fue el sello de su marca personal. Quizás su obra nos hace seguir con ganas de escuchar los hitos del rock nacional o simplemente nos haga pasar buenos momentos ahí, bajo el escenario, donde al empezar un tema a uno le sale casi instintivamente decir “Uh, escuchá, es de fulano”.

¿Habrá que tomar nota de esto?: en un momento del show se animó a largar un “Es re linda Salta, capaz que me vengo a vivir acá, quién sabe” a lo que a muchos se le abrió la ilusión de verla pasear, con una guitarra colgada al hombro, por la zona de la Balcarce, cantando y refrescándonos la memoria de vez en cuando.