Estrenamos una nueva columna semanal con algunos de los lanzamientos que hizo el músico rosarino recientemente a través de su sello independiente.
Entre 2009 y 2011 formé parte de Antes Que Nada, un programa que comenzó en Radio Dínamo y en breve va a iniciar su temporada 16, ahora en FM La Plaza. Lo conduce, como siempre, mi amigo Tomás García Senin, ricotero hincha de Independiente con el que compartí el aire durante muchas noches con una frase que resumía todo el concepto: «Pasa la vida, queda la música». Era, por supuesto, un choreo a Pinti y su «quedan los artistas». Pero qué es la cultura, en cualquiera de sus formas, si no una influencia tras otra amasada, mezclada y vuelta a salir desde nuestra propia perspectiva.
En Antes Que Nada hicimos un montón de cosas. Salíamos de lunes a viernes dos o tres horas, dependiendo la temporada, y teníamos como único objetivo hablar de canciones, bandas y artistas, sin dejar de lado el mundo en el que vivíamos. Porque nadie, todavía, incluso en esta era distópica y desquiciada, nos pudo convencer de que la música y la política no se mezclan. Por eso, a pesar de todo, queda la música. De ahí surge el nombre de esta columna que a partir de hoy intentará hacer lo mismo de manera escrita.
En el programa pasábamos discos enteros, escuchábamos el mismo tema varias veces en distintas versiones, poníamos canciones de media hora. De todo. Una vez, en septiembre de 2009, estuvimos dos programas completos (unas seis horas en total) haciendo cuestionarios ricoteros a oyentes que querían ganarse una de las dos entradas que teníamos para el recital del Indio Solari en Salta. Tardamos tanto porque nadie acertaba con el requisito de al menos dos preguntas correctas sobre la discografía de Patricio Rey. Finalmente se las llevaron. Uno de los que ganó fue el Máquina (¿O Mákina?), un pibe al que por esos años cruzaba seguido en el viejo Zumba y en el Kaetano de la Ameghino. Vivía cerca de mi casa de entonces, por la Plaza Gurruchaga, y siempre estaba con su novia, de la que no me acuerdo su nombre (qué desastre), los dos eternamente vestidos de negro.
Otra noche cayó Adrián Otero de improviso a la radio para promocionar el recital que iba a dar dos días después en la Casa de la Cultura. El último que dio en nuestra ciudad. En la radio no teníamos ni un solo disco de Memphis o de su carrera solista y la conexión a internet para pasar temas online era una desgracia. Así que empezamos la entrevista jugándonos la vida, poniendo la versión de «Slide blues», de Pappo, que Adrián había cantado en Pappo y Amigos, el disco doble de 2000 en el que también participaban Divididos, La Renga, Andrés Ciro, Moris, Calamaro, Viejas Locas, Almafuerte, Juanse y otros. Cuando la canción empezó a sonar, Otero me miró con una cara entre desencajada y extraviada. Pensé que se iba a enojar, pero le encantó. Fue una charla grandiosa. A Tomás y a mí nos quedó dando vueltas una frase: «Mi vida fue una discoteca». Es una lástima que no haya quedado grabada. Lo que sí registramos, gracias a Santiago Lofeudo, fue este tema que hicieron los Perro Ciego una noche de 2010.
En diciembre de 2010 hicimos un programa especial sobre Luca Prodan y hablamos con varios entrevistados que habían tenido que ver con el cantante de Sumo. Entre ellos, Germán Daffunchio, que paró su camioneta en una estación de servicio rutera para hablar con nosotros. Y por 2010 o 2011 hicimos otro especial, esa vez sobre Una celebración del rock argentino, una caja de nueve discos que Litto Nebbia había publicado por esos años, con cientos de canciones en homenaje a varios artistas de nuestra música. Participaban desde Spinetta a Flopa, de Calamaro a Pez. Litto estuvo casi dos horas hablando con nosotros, pasando las canciones de esos discos, charlando de la importancia de los grupos homenajeados y de cómo fue que los eligió. Fue de los mejores momentos que pasé como periodista.
Catorce años después, Litto sigue por la misma senda. Acaba de publicar otro box set. Esta vez es una caja de ¡doce discos! Se llama Los archivos de Nebbia y, como siempre, salió por Melopea, el sello independiente que Litto tiene hace décadas. Son 208 canciones en vivo. Litto lo explicó en este video que subió a sus redes.
El video es de principios de febrero. Esta semana, Litto anunció otro lanzamiento: Temporada 75, parte 2. Es la segunda parte de un trabajo que se publicó el año pasado. En ese momento, Litto habló del disco con un texto. «Parece que fuera una broma. Publicaré 18 álbumes en un momento donde mucha gente dice que ya no se venden más los discos, o algo peor, que la gente ya no quiere escuchar música nueva, o que el auto ya no trae reproductor de CDs», escribió. ¡Ojalá que nunca pare!